Villares proclama que es "absolutamente inocente"

Dimite un conselleiro de Galicia tras una denuncia de la presentadora Paloma Lago por agresión sexual

El conselleiro do Mar, Alfonso Villares, ha anunciado su dimisión tras serle notificado por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) que está investigado en un proceso judicial activado a raíz de una denuncia por la modelo y presentadora ferrolana Paloma Lago por agresión sexual.

 

La denuncia contra Villares, que en una rueda de prensa sin preguntas, arropado y aplaudido al final de su intervención por su equipo en la Consellería, ha proclamado su inocencia, se formalizó, según fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, "hace unos meses" en Ferrol.

 

Dada su condición de aforado como miembro del Gobierno (a la que él ha renunciado de forma expresa --tanto él como el resto de sus compañeros a excepción de Diego Calvo y Román Rodríguez ya no tenían actas de diputado en el Parlamento de Galicia--) el juzgado lo remitió a la Sala de lo Civil y Penal del TSXG. El caso está admitido a trámite y hay una investigación judicial abierta por un supuesto delito contra la libertad sexual.

 

Una vez que Villares, muy próximo al presidente gallego, Alfonso Rueda, a quien ha dado las gracias por su confianza, pierde su condición de aforado, el caso se devolverá al juzgado de Ferrol donde se formalizó la denuncia.

 

"NO QUIERO QUE PUEDA AFECTAR A LA XUNTA"

 

"No quiero que pueda afectar a la Xunta o a instituciones autonómicas", ha sostenido el conselleiro, quien ya ha comunicado al presidente del Gobierno gallego, Alfonso Rueda, su marcha.

 

Villares, quien según fuentes de su entorno había iniciado una relación con la presentadora, se ha declarado "absolutamente inocente" de la denuncia que se formula contra él y ha asegurado que centrará todas sus "fuerzas" en defenderse en el ámbito judicial.

 

"Le agradezco al presidente que comprendiese mis razones y aceptase mi dimisión, al igual que la confianza que depositó en mí al nombrarme", ha dicho Villares visiblemente afectado, antes de proclamar su convicción de que "se acabará haciendo justicia".

 

"Y sobre todo, de corazón, gracias a la gente que quiero y que me quiere porque ellos serán los más afectados por un proceso en el que, no cabe duda, se acabará haciendo justicia", ha finalizado, antes de abandonar la sala de prensa contigua a la que alberga las reuniones semanales del Ejecutivo gallego.