El FPO logra el 29,1% de los votos

La ultraderecha gana las elecciones legislativas en Austria

Los austriacos dieron el domingo su primera victoria en elecciones generales al ultraderechista Partido de la Libertad (FPO), según las primeras proyecciones de voto, lo que ilustra el creciente apoyo a los partidos de extrema derecha en Europa, alimentado por la preocupación por la inmigración.

 

El partido ultranacionalista FPO, de extrema derecha, logró el 29,1% de los votos, según las primeras proyecciones basadas en voto real, por delante del conservador ÖVP, que tuvo el 26,3%.

 

El FPO, euroescéptico y prorruso, mantuvo durante meses una ligera ventaja en las encuestas de opinión sobre el gobernante Partido Popular Austríaco (OVP), del canciller Karl Nehammer, en una campaña dominada por la inmigración y las preocupaciones sobre la economía.

 

Liderado por Herbert Kickl, de 55 años, se proyecta que el FPO obtuvo el 29,1% de los votos, por delante del OVP con el 26,3% y los socialdemócratas de centroizquierda con el 20,4%, según mostró una proyección de la encuestadora Foresight para la emisora ​​ORF después del cierre de las urnas.

 

Una proyección separada de la encuestadora Arge Wahlen también mostró que el FPO llega primero, ganando por un margen mayor que el que indicaban las encuestas finales, aunque necesitará formar una coalición gobernante si el presidente del país se lo pide.

 

"Si eso ocurriera, tengo que decir que el papel de Austria en la Unión Europea sería muy diferente. Kickl ha dicho en repetidas ocasiones que (el primer ministro húngaro) Viktor Orban es un modelo a seguir para él y que lo apoyará".

 

Kickl, quien este año forjó una alianza con Orban, se opone a brindar ayuda a Ucrania y quiere que se retiren las sanciones contra Rusia, argumentando que están dañando a Austria más que a Moscú.

 

Los activistas del FPO en un evento del partido en Viena aplaudieron con júbilo cuando se anunciaron las proyecciones electorales.

 

La victoria de Kickl puede resultar crítica, ya que se trata de una figura polarizadora bajo cuyo mando otros líderes del partido se han negado a trabajar.

 

En una discusión televisada con el líder del FPO después de conocerse las proyecciones, Nehammer reiteró su oposición a formar un gobierno con Kickl, aunque no descartó trabajar con el FPO como partido.

 

Kickl destacó que su partido había ganado y dijo que estaba dispuesto a hablar con todos los partidos para formar una coalición.

 

Migración: El FPO quiere construir una "fortaleza"

 

La victoria del FPO, que es crítico del islam y promete reglas más duras para los solicitantes de asilo, sigue a los avances de la extrema derecha en países como los Países Bajos, Francia y Alemania.

 

Sarah Wolf, diseñadora gráfica de 22 años y simpatizante del Partido Comunista Austríaco en Viena, dijo antes de la votación que estaba preocupada por lo que significaría una victoria del FPO.

 

Viktor de Lijzer, un soldado de 17 años que apoya al FPO, afirma que el partido estaba en la mejor posición para solucionar lo que él ve como una creciente violencia criminal estimulada por la inmigración.

 

El presidente Alexander Van der Bellen, que supervisa la formación de los gobiernos, ha expresado sus reservas sobre el FPO debido a sus críticas a la Unión Europea (UE) y a su negativa a condenar la invasión rusa de Ucrania. El partido se opone a las sanciones de la UE contra Moscú, citando la neutralidad de Austria .

 

Ha insinuado que podría bloquear a Kickl, defendiendo que la Constitución no le exige pedir al partido que ocupa el primer lugar que forme un gobierno, aunque esa ha sido la convención durante mucho tiempo.

 

El FPO, que pretende dejar de conceder asilo y construir una "fortaleza austriaca " que impida la entrada de inmigrantes, fue dirigida inicialmente por un exdiputado nazi en los años cincuenta.

 

El partido ha buscado moderar su imagen, pero el fin de semana surgió una nueva controversia sobre su pasado, cuando un video publicado por el periódico Der Standard mostró a miembros del partido asistiendo a un funeral donde se cantó una canción popular entre las SS nazis.

 

Un grupo de estudiantes judíos de Viena presentó una denuncia contra los miembros del FPO acusándolos de violar las leyes antinazis.