Cara a cara
Lo primero reconocer el buen hacer de Ana Pastor y Vicente Vallés como presentadores del debate electoral organizado por Antena 3 entre el Presidente del Gobierno y el líder de la oposición.
Y lo segundo que me gustaría saber, si alguno de sus ministros o de sus colaboradores se ha atrevido a decirle a Pedro Sánchez que no ganó el debate a Alberto Núñez Feijóo.
Confieso que estaba convencida en que Sánchez sacaría del baúl de los recuerdos al mejor Sánchez haciéndose con el triunfo en el debate y que se impondría a Núñez Feijóo.
La realidad es que quienes nos sentamos ante el televisor y sintonizamos Antena 3 nos encontramos con un Pedro Sánchez nervioso, agresivo en exceso, repetitivo a la defensiva e incapaz de presentar un proyecto de país para el futuro inmediato. Por su parte, Alberto Núñez Feijóo sí supo aprovechar el tiempo para desgranar algunos de sus compromisos si gana las elecciones.
Frente a Sánchez se sentaba un hombre tranquilo, que evitaba cualquier estridencia y que desprendía confianza. El rostro crispado de Sánchez frente al gesto relajado de Núñez Feijóo. El lenguaje corporal les definía a ambos y fue parte del éxito de Feijóo.
El tono impostado de Pedro Sánchez frente a la normalidad de Núñez Feijóo. Pedro Sánchez debería ver a solas la grabación del debate y ser capaz de analizar con distancia el resultado, tomar nota de que de poco le valieron sus continúas alusiones a Vox.
Pienso que durante estos años a Pedro Sánchez le han sobrado los "pelotas" a su alrededor y le ha faltado entereza para escuchar opiniones criticas.
Saben, habrá quien diga que en el cara entre el Presidente y el líder de la oposición ganó el líder de la oposición. Yo diria que Sánchez no ganó y Feijóo supo dar la mejor versión de sí mismo con dos cualidades, astucia y tranquilidad. Creo que el debate a Alberto Núñez Feijóo le ha aportado votos y Pedro Sánchez no ha obtenido rédito alguno. Veremos qué dicen las urnas.
Y lo segundo que me gustaría saber, si alguno de sus ministros o de sus colaboradores se ha atrevido a decirle a Pedro Sánchez que no ganó el debate a Alberto Núñez Feijóo.
Confieso que estaba convencida en que Sánchez sacaría del baúl de los recuerdos al mejor Sánchez haciéndose con el triunfo en el debate y que se impondría a Núñez Feijóo.
La realidad es que quienes nos sentamos ante el televisor y sintonizamos Antena 3 nos encontramos con un Pedro Sánchez nervioso, agresivo en exceso, repetitivo a la defensiva e incapaz de presentar un proyecto de país para el futuro inmediato. Por su parte, Alberto Núñez Feijóo sí supo aprovechar el tiempo para desgranar algunos de sus compromisos si gana las elecciones.
Frente a Sánchez se sentaba un hombre tranquilo, que evitaba cualquier estridencia y que desprendía confianza. El rostro crispado de Sánchez frente al gesto relajado de Núñez Feijóo. El lenguaje corporal les definía a ambos y fue parte del éxito de Feijóo.
El tono impostado de Pedro Sánchez frente a la normalidad de Núñez Feijóo. Pedro Sánchez debería ver a solas la grabación del debate y ser capaz de analizar con distancia el resultado, tomar nota de que de poco le valieron sus continúas alusiones a Vox.
Pienso que durante estos años a Pedro Sánchez le han sobrado los "pelotas" a su alrededor y le ha faltado entereza para escuchar opiniones criticas.
Saben, habrá quien diga que en el cara entre el Presidente y el líder de la oposición ganó el líder de la oposición. Yo diria que Sánchez no ganó y Feijóo supo dar la mejor versión de sí mismo con dos cualidades, astucia y tranquilidad. Creo que el debate a Alberto Núñez Feijóo le ha aportado votos y Pedro Sánchez no ha obtenido rédito alguno. Veremos qué dicen las urnas.
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