Europa Press
Sábado, 08 de Julio de 2023
El dueño impedía la entrada a los técnicos sanitarios
Clausuran por insalubridad un restaurante de Usera
La Junta de Distrito de Usera ha declarado la suspensión de actividad por insalubridad, entre otros importantes motivos, de un restaurante que impedía continuamente la entrada a sus técnicos del Departamento de Salud, ha confirmado a Europa Press una portavoz del Cuerpo Local.
El local en cuestión está situado en la confluencia de las calles Dolores Barranco y Ferroviarios. Los técnicos habían recibido varias denuncias ciudadanas informando de que habían tenido vómitos y diarrea tras comer allí. Pero en varias ocasiones quisieron entrar y el dueño se lo negó, por lo que este martes, tras avisar a la Policía Municipal, lo consiguieron.
En el interior se encontraron con una escena más terrible de lo que pensaban. Además de la suciedad común a todo el restaurante, había alimentos que necesitan refrigeración encima de las mesas a pleno calor del verano, además de una plaga de insectos. Según el diario El Mundo, algunos clientes han denunciado que en el interior del establecimiento los empleados fuman y escupen.
Además, las etiquetas de todos los productos están solo en chino, no se puede conocer su trazabilidad y los empleados tenían el carnet de manipulador de alimentos. Ahora el restaurante está cerrado pero el propietario ha colgado un cartel de 'cerrado por vacaciones', misma excusa que indican si llamas por teléfono para realizar un pedido a domicilio.
El local en cuestión está situado en la confluencia de las calles Dolores Barranco y Ferroviarios. Los técnicos habían recibido varias denuncias ciudadanas informando de que habían tenido vómitos y diarrea tras comer allí. Pero en varias ocasiones quisieron entrar y el dueño se lo negó, por lo que este martes, tras avisar a la Policía Municipal, lo consiguieron.
En el interior se encontraron con una escena más terrible de lo que pensaban. Además de la suciedad común a todo el restaurante, había alimentos que necesitan refrigeración encima de las mesas a pleno calor del verano, además de una plaga de insectos. Según el diario El Mundo, algunos clientes han denunciado que en el interior del establecimiento los empleados fuman y escupen.
Además, las etiquetas de todos los productos están solo en chino, no se puede conocer su trazabilidad y los empleados tenían el carnet de manipulador de alimentos. Ahora el restaurante está cerrado pero el propietario ha colgado un cartel de 'cerrado por vacaciones', misma excusa que indican si llamas por teléfono para realizar un pedido a domicilio.
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