Cómo hacerse con una buena furgoneta de segunda mano

 

 

Las furgonetas tienen sus particularidades, comenzando por los diferentes tamaños y capacidades tanto de pasajeros como de carga. Furgonetas segunda mano Madrid se pueden encontrar tanto mixtas, que se pueden utilizar tanto con fines laborales como familiares. Las llamadas combi, que son muy similares pero en lugar de tener la parte trasera opaca, la tienen acristalada y suelen tener mayor número de asientos. Las afamadas furgonetas tipo Camper, que incluyen elementos que permiten viajar y alojarse en ellas. Incluso se podría incluir en el grupo al vehículo 4x4 en función del modelo que sea, porque para realizar algunos trabajos son tremendamente útiles.  

 

Según para qué fin sea la furgoneta que se va a adquirir, probablemente lo primero que hay que mirar es la motorización para que no se quede corta ni pagar por más de lo que se necesita. En una página web fiable del estilo de la empresa Inniauto es posible realizar una búsqueda filtrada que facilite las cosas. Es un concesionario de segunda mano que dispone de taller propio para los trabajos de chapa, pintura o mecánica que se necesiten. El taller está próximo a la es otro clásico cuya motorización diesel ha dado 

 

En el mercado se pueden encontrar furgonetas en buen estado de los modelos más demandados como la clásica Citroën Berlingo, que destaca por su modularidad interior y espacio de carga. La furgoneta Ford transit es otro referente en las furgonetas de gran tamaño por su excelente volúmen de carga que da para mucho. El modelo Renault Kangoo es otro clásico cuya motorización diesel ha dado mucho juego.

 

Cuando se trata de una inversión en una furgoneta, hay que tomarse el tiempo necesario para buscar y comparar entre las diversas opciones. Especialmente teniendo en cuenta que su principal función va a ser laboral. 

 

Al elegir no hay que guiarse sólo por el kilometraje que tenga esa furgoneta, puesto que si se adquiere en un lugar con taller propio para su puesta a punto, lo que se adquiere es un vehículo en condiciones como nuevo. Y los kilómetros de una furgoneta por lo general no son del mismo tipo que los que suma un turismo, entre viajes y trayectos urbanos. Además hay que tener en cuenta que las furgonetas están en la categoría de vehículo industrial, lo que les obliga a pasar la ITV anualmente ya desde el segundo año. 

 

 

El aspecto de la ITV es uno de los detalles más importantes porque esto implica que su mantenimiento ha sido el adecuado. Si bien en este punto cabe recordar que desde que la furgoneta cumple 10 años esa ITV pasa a ser cada 6 meses por razones de seguridad, por lo que por muy atractivo que resulte el precio al comprarla de segunda mano, será mejor que sea de una fecha más reciente. 

 

También cuentan detalles como adquirirla a una empresa que se haya asegurado de que la furgoneta no tiene cargas en la DGT y que nos ayude con todos los trámites administrativos. En definitiva, comprar una furgoneta tiene sus particularidades como tener en cuenta la capacidad que se necesita y el peso a transportar.