Los Museos Vaticanos abren sus colecciones etnográficas africanas y americanas

 

Según la página web de la institución, los insika, uno de los raros testimonios de la sofisticada y compleja sociedad ruandesa, que se refleja también en su refinada técnica de elaboración, fueron restaurados en el Laboratorio Polimatérico de los Museos Vaticanos y coordinados por la responsable Stefania Pandozy, bajo la dirección científica del padre Nicola Mapelli, Curador del Museo Etnológico Vaticano Anima Mundi.

 

"El precario estado de conservación y la fragilidad de los materiales constitutivos hicieron necesaria en 2022 un importante intervención restauradora, precedida no sólo por un estudio en profundidad de las técnicas de entrelazamiento y tejido, sino también por específicos exámenes diagnósticos sobre los diferentes tipos de fibras vegetales utilizados, así como sobre los pigmentos y aglutinantes usados", han señalado desde los Museos Vaticanos.

 

El tejido y la trama de las fibras que componen estos biombos de rafia lo realizaban principalmente las mujeres de alto rango que, respetando la tradición, reproducían motivos decorativos establecidos y convencionales cuyas formas geométricas estaban inspiradas en el mundo animal y vegetal.

 

La trama singular de líneas, así como el uso dinámico del claroscuro, convertían estos biombos en el mobiliario ideal para delimitar, con elegancia y primor, los varios ambientes de las residencias reales, creando de este modo zonas reservadas a las distintas actividades cotidianas.

 

Los visitantes del Museo Etnológico Vaticano Anima Mundi, podrán admirar estos dos insikas dentro del itinerario expositivo "África", recientemente abierto al gran público. La iniciativa se produce en un momento en que los museos etnográficos de Europa y Norteamérica se enfrentan a la exigencia de grupos indígenas y antiguas colonias de devolver objetos que consideran que fueron robados durante la época colonial.

 

CANADÁ RECLAMA OBJETOS

 

Durante el viaje del Papa a Canadá, en julio del año pasado, el primer ministro, Justin Trudeau, que se reunió con el pontífice en Quebec, pidió que fueran "repatriados los objetos indígenas algunos de ellos conservados en los Museos Vaticanos), que como los biombos ruandeses fueron enviados al Vaticano para la Exposición Misional Vaticana organizada por Pío XI con ocasión del año Santo (diciembre 1924-enero 1926) que logró reunir más de 100.000 objetos y obras de arte de los pueblos indígenas de todo el mundo.