Encerrona en el Ateneo al Consejero Cultural de Irán

 

En dicho acto se entregaban el Primer y Tercer Premio internacional de Poesía por Palestina, Al Quds, 2021, otorgados en Irán a dos poetisas españolas; una de ellas la Presidenta de la mencionada Sección de literatura del Ateneo y presentadora del acto, Victoria Caro. A tal fin acudía el Consejero Cultural de la Embajada iraní, Sr, Ahmadi. El premio no había podido ser recogido en Irán por las interesadas a causa del Covid-19. De Irán se había encargado a la Consejería Cultural en Madrid entregarlo. Se contactó a Victoria Caro y se le ofreció entregarlo en un acto en dicha Consejería; pero ella insistió en que se entregase en el citado Acto del Ateneo.

 

Al comienzo del mismo, ya hizo la Presentadora alusión a la presunta represión sobre la mujer en Irán; en lo que volvió a incidir más adelante, tras entregar dichos premios el Consejero Cultural. La Presentadora llamó al estrado a un  destacado opositor en Madrid del régimen iraní, que habló de la presunta represión en Irán; comentando sobre encarcelamientos, torturas e incluso asesinatos desde el poder. Pidió la palabra el Sr, Consejero, dando sus razones contra lo dicho. Fue aplaudido por la mayoría de los asistentes, como lo había sido el señor disidente. Volvió algo de polémica cuando el Consejero se iba, antes de acabar el Acto. En la Consejería no habían sido avisados que saldrían dichos temas en el mismo.

 

Yo también me salí disgustado, cuando se fueron los de la Consejería; igualmente estaba muy disgustado otro asistente con el que hablamos fuera. Hubo personas que, acabado el Acto, expresaron allí, en público su discrepancia con que se mezclara lo del voto femenino en España con temas de Irán. He pedido opinión a diversas personas, parte de ellas opuestas al régimen iraní, y la opinión es unánimemente crítica con lo sucedido. 

 

Choca tal actitud de la Presentadora con la que se tuvo con ella, a comienzos del verano, en un acto sobre el Día Quds (Jerusalén), instituido por Jomeini, en la sede de la Asociación Ahlul-Bayt (Plaza de Peñuelas, Madrid) donde pudo vestir a la manera occidental y fue atendida con deferencia por el Embajador iraní y diverso personal de la Representación.

 

Ya hubo otra ocasión pasada en que dicha Presentadora actuó en modo peculiar. A instancia mía, hablando con la Representación palestina, se le invitó a la Cena de Navidad de la Asociación Hispano-Palestina Jerusalén; invoqué los méritos que ella ya tenía en el apoyo a Palestina y que han continuado hasta hoy. Allí, sin haberlo consultado con los organizadores, hizo entrega de dos premios de Organizaciones a las que representaba, llamando ella misma a los galardonados a recibirlos. Si bien creo recordar que tenían relación con Palestina dichos premios no es proceder adecuado.

 

Volviendo a los del Ateneo, no se puede invitar a un Acto a alguien que te da allí un premio, y ponerle en situación política comprometida; máxime cuando es Consejero Cultural y no Político. Esas  polémicas deben llevarse a debates al efecto. Por lo demás, hay en Madrid medios de difusión a los que acudir que siempre atacan a Irán y que, normalmente, nunca los hacen con EEUU e Israel. 

 

Los diplomáticos están en situación minoritaria claramente en país distinto al suyo, ejerciendo una labor sacrificada de relación entre las naciones. La consideración hacia ellos no obliga sólo a las autoridades del país receptor, también obliga a los ciudadanos que deben dar ejemplo de acogida y respeto. Lo sucedido en el Ateneo no refleja el espíritu de dicha institución, ni de Madrid, ni de España.