La familia real británica despedirá el 17 de abril al duque de Edimburgo

 

La ceremonia, que será televisada en vivo, tendrá lugar en la capilla de San Jorge del castillo y estará precedida de un minuto de silencio en todo el país.

 

Para cumplir con las restricciones por Covid-19, que actualmente rigen en Inglaterra, se celebrará una ceremonia real y no un funeral de Estado, como estaba previsto antes de la pandemia. Asimismo, tan sólo 30 personas podrán estar presentes en el momento de despedir al príncipe de Edimburgo. Por este motivo, el primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, ha confirmado que no acudirá al funeral.

 

"El primer ministro siempre ha querido actuar de acuerdo con lo que es mejor para la Casa Real, por lo que permitir la mayor cantidad posible de miembros de la familia no asistirá al funeral el sábado", afirmó en un comunicado su oficina de Downing Street.

 

Una vez oficializada la ceremonia, dirigida por el deán de Windsor y el arzobispo de Canterbury, los restos mortales del príncipe de Edimburgo serán trasladados a la bóveda real del castillo de Windsor. Precisamente, el último entierro en esta bóveda fue el de su madre en 1969, la princesa Alicia de Battemberg, si bien sus restos fueron trasladados posteriormente a Jerusalén.

 

CARLOS MUESTRA SU DOLOR

 

El príncipe Carlos, primero en la línea de sucesión al trono de Inglaterra, hizo una declaración ante los medios este sábado en la que quiso rendir homenaje a su padre fallecido. "Como pueden imaginar, mi familia y yo extrañamos enormemente a mi padre", afirmó el príncipe Carlos.

 

“Era una figura muy amada y apreciada que, puedo imaginar, se habría sentido profundamente conmovido por la cantidad de personas, aquí, en todo el mundo y en la Commonwealth, que comparten nuestra pérdida y nuestra tristeza". "Por encima de todo, habría estado asombrado por las reacciones y las cosas tan emocionantes que se han dicho sobre él. Desde ese punto de vista, mi familia y yo estamos profundamente agradecidos”, añadió.

 

Este sábado al mediodía, se dispararon 41 salvas de cañón en su honor en las cuatro capitales de las naciones del Reino Unido -Londres, Edimburgo, Cardiff y Belfast y en Gibraltar. El duque de Edimburgo sirvió en la Marina Real durante la Segunda Guerra Mundial y ocupó el cargo ceremonial de lord gran almirante.

 

PRESENCIA DE HARRY

 

La familia real británica confirmó también que el príncipe Harry, duque de Sussex y nieto del fallecido, acudirá a la ceremonia desde su residencia en Los Ángeles. Su mujer y duquesa de Sussex, Meghan Markle, no asistirá por recomendación médica debido a su avanzado embarazo.

 

La pareja estuvo en el foco de la polémica tras su entrevista con Oprah Winfrey en la que acusaron de racismo a miembros de la familia real.