La actividad física y la salud de nuestras rodillas

 

Aunque todas las partes de nuestro cuerpo son importantes, una de las más delicadas y que hay que cuidar con esmero son las rodillas; y más cuando las sometemos a altas cargas de peso al hacer ejercicios. 

 

Existen implementos que sirven para protegerlas como las rodilleras y las cintas rotulianas. Un ejemplo claro de que es necesario usar una de estas protecciones es cuando practicamos crossfit, ya que se trata de una rutina donde solemos cargar mucho peso y realizar movimientos bruscos que, en su mayoría, impactan las rodillas. En tal sentido, las rodilleras crossfit se convierten en una excelente opción. En especial, si ya hemos sufrido de una lesión. 

 

El mercado actual ofrece una gran variedad de alternativas a la hora de cuidar y proteger nuestras rodillas. Como ya lo mencionamos, las rodilleras son unas de estas, pero también hay otros productos como la cinta rotuliana o cincha, por lo que resulta necesario conocer las diferencias que existen entre estas, cuándo usar una u otra y para qué sirve cada una.

 

 

Básicamente se puede resumir que las rodilleras se usan cuando se ha sufrido una lesión, mientras que las cintas rotulianas funcionan de manera preventiva para generar soporte y compresión en el área. 

 

También es preciso detallar que existen diferentes tipos de rodilleras, entre las que destacan las rodilleras profilácticas o preventivas (se utilizan para hacer deporte como el crossfit), las funcionales, las de rehabilitación y las ortopédicas. 

 

 

Estas cintas suelen ser usadas por deportistas de alto rendimiento como los fisicoculturistas  y las personas dedicadas a la práctica de halterofilia, puesto que ambas disciplinas requieren del levantamiento de peso. Estas cintas se deben enrollar de manera firme alrededor de la rodilla haciendo un espiral. Su compra es bastante fácil, debido a que existen sitios como https://cintarotuliana.es, donde se pueden encontrar varios modelos de diferentes materiales y de marcas reconocidas. 

 

El uso frecuente de este tipo de rodilleras permite mejorar el rendimiento en la práctica deportiva y, lo más importante de todo, ayuda a prevenir lesiones que se relacionan con el levantamiento de pesas y las sentadillas, ya que logran disminuir la tensión que se presenta en los tendones, rótula y cuádriceps.

 

En resumen, el uso de prensas de piernas con mucho peso y las sentadillas con carga en cabeza y espalda son los ejercicios que más alto impacto producen en las rodillas. 

 

Por otro lado, es importante recalcar que usar de una forma inadecuada estas cintas, puede llegar a provocar graves problemas de salud. Incluso, un uso incorrecto de este implemento podría ocasionar artritis y otras condiciones delicadas donde se ven involucrados huesos y articulaciones. Es entonces imperativo consultar con profesionales antes de usarlas. 

 

 

Si somos aficionados del crossfit, debemos tener en cuenta una serie de factores para elegir las rodilleras más adecuadas, de acuerdo al nivel de protección que necesitamos. Entre estos mencionamos: 

 

 

Existen rodilleras de tela que proporcionan bajo nivel de compresión y son perfectas para aquellas personas que hayan sufrido una lesión leve. También se encuentran las rodilleras de neopreno que generan importantes grados de calor en la zona, poseen un nivel medio de compresión y previenen desgarramientos y otras lesiones. 

 

Además, se debe tomar en cuenta el grosor de la rodillera. Las de 3 milímetros son más ligeras y ofrecen una buena libertad de movimientos; las de 5 milímetros generan compresión y son las más buscadas por quienes practican crossfit; y finalmente, encontramos las de 7 milímetros, que son utilizadas para levantamientos de peso extremo, ya que generan mejor estabilidad y seguridad.