Su diseño exterior ha sido realizado en el Design Center de la propia compañía y toma sus proporciones exteriores de los vehículos de clase premium, una línea muy aerodinámica con entradas frontales de aire y un spoiler posterior que resalta el efecto flotante del techo. Aporta, además, un amplio espacio interior al tiempo que coloca su centro de gravedad lo más bajo posible para lograr un dinamismo destacable.
El DFSK 500 está pensado desde los primeros pasos de su diseño para ofrecer un gran habitáculo. Así, con una distancia entre ejes de 2,65 metros ofrece uno de los espacios más habitables de su segmento. En la parte delantera encontramos una anchura máxima de 1,50 metros mientras que, en la fila trasera, esta llega hasta unos destacables 148 centímetros. Ahí, el espacio libre para las piernas de los pasajeros alcanza los 82 centímetros y, además, con un piso completamente plano.
En cuanto a la mecánica, el motor 1.5 del DFSK 500 tiene ya una larga tradición dentro de la multinacional china, ya que se ha utilizado con anterioridad en varios de sus productos en todo el mundo. Se trata de un motor atmosférico de cuatro cilindros en línea con 1.498 centímetros cúbicos y 106 CV de potencia máxima a 6.000 rpm. Su cifra de par, con 148 Nm entre 2.800 y 3.600 rpm, asegura una conducción relajada, aunque con la suficiente reserva de ímpetu si se necesita.
La gran ventaja de este motor es que, además, puede adaptarse sin problema para su uso con gas licuado de petróleo (GLP) como combustible. El resultado en un aumento de la autonomía más allá de los 1.100 kilómetros, una notable reducción del coste por kilómetro y la obtención de la etiqueta ECO de la DGT.
Más de la mitad de la estructura del nuevo DFSK 500, el 52%, está formada por aceros de alta resistencia. Una estructura en la que, para cumplir con los rigurosos estándares europeos ECE R94 y ECE R95 de colisión frontal y lateral, encontramos múltiples zonas con deformación programada que incrementan la seguridad de los ocupantes en caso de un posible impacto.
El DFSK 500 ha sido diseñado para que su estructura ejerza como un verdadero transmisor de fuerzas. En caso de producirse una colisión grave, el impacto se dispersará a diferentes áreas de absorción de energía para garantizar la seguridad de las personas en el interior del coche.
En cuanto a los dispositivos electrónicos de seguridad, el DFSK 500 monta el sistema ESP 9.3 de control de la trayectoria y estabilidad suministrado por la multinacional alemana Bosch. Este dispone de un procesador de cuatro núcleos que ofrece una mayor velocidad de análisis de datos y una mejor respuesta. En el habitáculo encontramos, además, dos airbags frontales de gran tamaño y otros tantos laterales.
El nuevo DFSK llega al mercado español en dos niveles de acabado, denominados Luxury e Intelligent. En ellos, encontramos un abundante equipamiento: acceso sin llave, arranque por botón, climatizador, cámara de visión trasera de ayuda al aparcamiento, freno de estacionamiento eléctrico, ordenador de viaje, control de la velocidad de crucero o tapicería de eco-cuero.
Además, también cuenta con asistencia de arranque en rampa. Así, cuando la pendiente supera el 3%, el DFSK activa los frenos durante uno o dos segundos para un inicio de la marcha suave y sin sobresaltos.
La conectividad está garantizada gracias, por un lado, a la aplicación Car Auto y, por otro, al sistema Mirrorlink. Este último permite a los usuarios acceder de forma segura a las funciones de su teléfono móvil en el coche mientras conducen.
El nuevo DFSK 500 está disponible en dos terminaciones y con cinco colores de carrocería donde elegir. Su precio arranca en los 18.495 euros de la versión DFSK 500 Luxury.
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